¿Qué contiene Bacterium Plus? 

Bacterium es un producto de origen natural, que combina 5 cepas principales de probióticos naturales: Lactobacillus acidophilus, Lactobacillus Rhamnosus y B. bifidum. Son probióticos necesarios para fortalecer el organismo.

Se habla mucho de los probióticos como importantísimos para nuestra salud. Son beneficiosos principalmente en el aparato digestivo, donde actúan a favor de la microbiota intestinal. Así evitamos que los agentes dañinos tengan lugar para proliferarse. Cuando tenemos probióticos dentro del cuerpo, estos ayudan a eliminar todos aquellos agentes  invasores y lo protegen mejor ante el ataque de cualquier toxina.

Los probióticos como Bacterium Plus dentro de la dieta diaria ayudan a mejorar considerablemente el sistema digestivo y un sin número de padecimientos.

¿Para qué sirve Bacterium Plus?

Ayuda a mejorar la digestión

La mayoría de las afecciones digestivas están relacionadas a la microbiota, por lo que llegando a un buen tratamiento de esta, disminuimos las formas de contraer enfermedades gastrointestinales.

Ayuda a impedir la proliferación de bacterias malas en el intestino

Es importante mantener los niveles correctos y moderados del crecimiento bacteriano en nuestro intestino. De esto depende la nutrición y el estado de salud en las personas. El consumo de probióticos como Bacterium Plus contribuye en la disminución del sobrecrecimiento bacteriano en el intestino delgado.

Ayuda prevenir la Cándida Albicans

La cándida es un hongo que normalmente vive en armonía dentro de nosotros. Pero, cuando empieza a crecer sin control, genera una parasitosis. Esta es una enfermedad infecciosa causada por parásitos que necesitan de otros microorganismos vivos para sobrevivir, es decir necesitan de un huésped que les pueda aportar nutrición y alojamiento. La Cándida Albicans ocasiona diversos problemas de salud, siendo los más comunes:

✓ Mala Digestión

✓ Dolores de cabeza

✓ Diabetes

✓ Mala Circulación

✓ Colesterol alto

✓ Mal aliento

✓ Gases

✓ Cansancio crónico

✓ Falta de energía y ánimo

✓ Hinchazón abdominal, etc...

Ayuda a tratar enfermedades alérgicas

Nuestro organismo tiene la capacidad de poder diferenciar todos aquellos antígenos que tienen que ser controlados y todos aquellos otros que deben que ser eliminados.  

Para que exista un equilibrio entre estos mecanismos, el sistema inmune tiene que saber detectar a los microorganismos, y activarse ante la presencia de algún patógeno. Sin embargo, algunas veces nuestro sistema se activa de manera inadecuada produciéndose así las llamadas hipersensibilidades o alergias.

Se dice que es en la mucosa gastrointestinal donde el sistema inmune “aprende” a regular su funcionamiento. Es en el intestino donde se tiene la gran mayoría de las células del sistema inmune. Aunque la mayor parte de los antígenos que ingresan por las diferentes mucosas del organismo son inofensivos, existe cierto grupo de aquellos que generan reacciones alérgicas.

Ayuda a reducir la depresión y ansiedad

¿Los probióticos afectan en el estado de ánimo? ¡Sí! 

Esto se debe a que existe un vínculo entre la microbiota y el cerebro. Si estamos estresados, nuestra microbiota se verá afectada y, por lo tanto, no va a funcionar de manera correcta. Algunos microorganismos de nuestro intestino fabrican neurotransmisores. Estos funcionan como mensajeros entre el intestino y el cerebro. Muchas veces, nuestros problemas digestivos se deben también a problemas emocionales. Cuando tenemos problemas personales, a menudo se ve reflejado en nuestra digestión. Por lo tanto, es importante tener una familia de probióticos dentro de nuestro organismo porque los probióticos hacen que tus hormonas funcionen mejor y así aportamos a que nuestra mente y nuestras emociones mejoren.

Ayuda a prevenir problemas con el colesterol alto e hipertensión. 

Se ha descubierto una serie de mecanismos posibles para la eliminación del colesterol por parte de los probióticos, que incluyen: absorción de colesterol en las superficies celulares, asimilación del colesterol en las membranas celulares, degradación directa del colesterol y desconjugación de los ácidos biliares. Nuestra microbiota está fuertemente involucrada, no sólo en la susceptibilidad a las infecciones, sino también en el riesgo de padecer enfermedades inflamatorias, metabólicas y degenerativas.